Aumento de la visa estadounidense 2025: el precio del sueño americano | Entrepreneurs Tip
La visa que cuesta un sueño: el aumento del precio del proceso consular estadounidense

La visa que cuesta un sueño: el aumento del precio del proceso consular estadounidense

Colombianos En EL Exterior

El costo de la visa estadounidense sube a 435 USD desde octubre de 2025. Más que una cifra, el aumento revela nuevas desigualdades y redefine el sueño de migrar para miles de colombianos.


El aumento de la visa estadounidense —de 185 a 435 USD— marca un antes y un después para miles de colombianos. Lo que antes era un trámite ahora se convierte en un filtro económico y simbólico. Bajo la Ley 119-21, viajar legalmente a EE. UU. ya no depende solo del deseo, sino de la capacidad de pagar el precio.”

El incremento en el costo de la visa para viajar a Estados Unidos no es solamente un número; afecta la posibilidad de que millones de colombianos alcancen sus sueños.  Hoy en día, el costo para entrar legalmente a Estados Unidos es de 435 dólares estadounidenses, lo cual equivale a más de 1.600.000 pesos según la Tasa Representativa del Mercado (TRM).

Según la Ley de Visas (Ley Pública 119-21), a partir del primero de octubre de 2025, los colombianos que soliciten visas tendrán que pagar una tarifa mayor: ahora es de $435 dólares, en lugar de $185.  Este aumento considerable no es únicamente una tarifa consular, sino un indicio de una política migratoria que se vuelve cada vez más restrictiva.  Fundamentalmente, revela la brecha entre el derecho a la movilidad mundial y los intereses de control fronterizo estadounidenses, que priorizan la seguridad y la selectividad económica en lugar de la equidad para migrar.

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Tarifa y su impacto económico

Maleta con bandera de Estados Unidos y símbolo de dólar, que representa el precio del sueño americano tras el aumento de la visa estadounidense en 2025.

La tarifa ha subido aproximadamente un 67% respecto a la tarifa de visa actual impuesta para categorías de no inmigrantes, como anunció anteriormente la embajada de EE.UU. en Colombia. El aumento se debe a una nueva categoría llamada Tarifa de Integridad de Visa de USD 250 (lo que equivale a alrededor de 1.000.000 pesos colombianos) que se sumará a cada visa de no inmigrante, excluyendo turistas, visitantes de intercambio y la mayoría de las categorías de estudiantes.

En el dinero de hoy (en pesos colombianos), eso sería aproximadamente 1,696,061 COP o más de un incremento del 135%. Una cantidad muy significativa cuando el ingreso mensual promedio para un colombiano es aproximadamente un millón cuatrocientos mil pesos, según el Ministerio del Trabajo. Obtener una visa en términos reales es más de un salario mensual sin el viaje al consulado, el pasaporte o pasar por la comisión médica.

De acuerdo con Manuel Castells (2009, p. 2053), estas barreras económicas son una forma de “red civil”. Estos países avanzados simplemente deciden quién puede o no puede moverse libremente en los flujos mundiales de información, capital y personas. Por lo tanto, la movilidad internacional se convierte en un privilegio para aquellos que son capaces de incrustarse en estas redes gracias a su poder económico.

¿Quiénes se ven afectados y quiénes no?

La nueva cifra es relevante para la mayoría de todas las visas de no inmigrantes, aquellas que más inquieren los colombianos. Incluyen visas de turista y de negocios (B1/B2), visas de estudiante (F & M), programas de intercambio (J); categorías de trabajo temporal H, L, O, P, Q y R. Es un disco rayado para los jóvenes que desean estudiar en el extranjero, familias que sueñan con vacaciones internacionales o profesionales que intentan mejorar su vida laboral.

Por otro lado, las visas de inmigrante para establecerse permanentemente y las visas diplomáticas o oficiales no se han visto afectadas. Y hay un giro administrativo: la tarifa no se cobra a nadie que arregló su cita antes del 1 de octubre, por lo que surge una desigualdad temporal: dos personas con condiciones idénticas podrían terminar pagando tarifas diferentes, insinuando lo que Robert Dahl (1999) llamaría una “desigualdad estructural de acceso” tanto en procesos democráticos como administrativos.

En otras palabras, una norma aparentemente neutral puede operar en favor de algunos sectores y en detrimento de otros.

El papel de la Tasa de Cambio Representativa del Mercado (TRM)

aviso de aumento del costo de la visa estadounidense a 435 USD en 2025.

Está valorada en USD $435, sin embargo, el equivalente en pesos colombianos fluctúa. Varía dependiendo del TRM para pagar en el día. Como el peso colombiano es una moneda inestable, una devaluación repentina puede hacer que el procesamiento de la visa sea mucho más caro.

Este elemento financiero convierte la solicitud de visa en una especie de “apuesta de divisas”, en la que los solicitantes necesitan observar el dólar para saber exactamente cuándo pagar. Así, la movilidad humana se somete a las leyes del mercado, a la inversión de capital y a la especulación financiera, un proceso que Zygmunt Bauman (2005) ha llamado característico de la “modernidad líquida”: la gente sueña y se mueve en tiempos en que el crecimiento de los árboles del bosque, la dirección del viento, las preferencias de los alcohólicos o cualquier otra cosa pueden ser redirigidos por el capital global.

Métodos oficiales de pago en Colombia

Los tres canales oficiales para el procedimiento de pago continúan siendo los siguientes:

  •  Pago en línea con tarjeta de crédito/débito internacional a través del portal AIS.
  • Pago PSE (directamente desde la cuenta bancaria en Colombia)
  • BOLETA DE PAGO EFECTIVO EN OFICINAS DE BANCO GNB SUDAMERIS (Previa impresión en el sistema de citación)

Este recibo es válido por 3 días, cualquier cargo adicional es fraude. Esta advertencia no es trivial: los informes de estafas y gestores falsos se han multiplicado, particularmente entre aquellos con menos acceso a la información digital.

Desde un punto de vista sociológico, Boaventura de Sousa Santos (2010) nos alerta de que la realidad puede revelarse no solo en base a la distribución de ingresos, sino también a través del acceso al conocimiento. En este sentido, la ignorancia (tecnológica o institucional) no es solo un elemento de exclusión en el “estilo” moderno, sino también un puente cognitivo que determina quién puede acceder con seguridad a algún procedimiento y quién queda expuesto a la informalidad.

Implicaciones sociales y simbólicas

Ilustración que representa las implicaciones sociales del aumento de la visa estadounidense en 2025.

Hay un simbolismo profundo en el aumento de la visa. Migrar o viajar a los Estados Unidos se convierte en un privilegio económico y cultural. Pero en un país como Colombia, donde gran parte de la población vive con poco o ningún ingreso, el proceso consular deja de ser un derecho y se convierte más en un lujo.

Y el nuevo sistema de inmigración favorece no solo a estudiantes y trabajadores de altos vuelos, sino a una disposición a pagar. Esto puede verse como una forma de “selección social global”, en la que la nacionalidad y el capital se entrelazan para determinar quién puede cruzar una frontera.

Desde el punto de vista del PNUD y los estudios de movilidad humana, estas medidas amplían las discrepancias de desigualdad global, previniendo el flujo de talento y conocimiento. En palabras de Amartya Sen (1999), el desarrollo es la expansión de la libertad, y cualquier política que restrinja dicho movimiento restringe el potencial humano.

Irónicamente, al intentar regular la migración, Estados Unidos puede estar empujando a las personas hacia rutas irregulares. Cuando el precio de acceso a la legalidad se vuelve inalcanzable, las versiones informales proliferan: cruzadores de frontera guiados por coyotes; anillos de contrabando o visas falsas. "Lo que parece un control puede realmente crear más riesgos."

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Un análisis ético y de derechos humanos

El acceso a la movilidad internacional puede concebirse como un derecho implícito que cae dentro del ámbito de los derechos humanos, conectado al Artículo 13 de la Declaración Universal de 1948, que determina el derecho a la libertad para salir de cualquier país, incluido el propio.

Cuando los costos y las cargas administrativas son demasiado altos, este derecho se convierte en una mera ficción accesible solo para los ricos. Pero la filósofa Martha Nussbaum (2011) ha sugerido que la justicia global depende de reconocer las capacidades reales, no solo las formales. En este caso, los colombianos menos acomodados están siendo efectivamente despojados de su capacidad de moverse.

Por lo tanto, el aumento no puede solo analizarse desde la economía, sino también desde la moral pública y las repercusiones psicológicas para aquellos que ven sus sueños destrozados de viajar, estudiar o reunirse con sus familias. Y en este sentido, las visas son una frontera invisible: un filtro simbólico que separa a los “nosotros” de los “ellos”.

Comparaciones regionales: el ejemplo latinoamericano

Colombia tampoco está sola. Las tarifas más altas se aplican a la mayoría de los solicitantes de América Latina. Pero golpea más duro en países con monedas inestables. En México, por ejemplo, la conversión es de aproximadamente 7,600 pesos mexicanos y en Argentina, dependiendo de si sigue un tipo de cambio oficial u otro, es más de 400,000 pesos argentinos.

Estas diferencias destacan cómo una política global impacta de manera desigual cuando se tiene en cuenta cada economía local. Lo que es una tarifa de rutina para un estadounidense, se convierte en parte de la barrera de movilidad social para un colombiano.

Desde una perspectiva crítica, podríamos argumentar que el sistema de inmigración actual se basa en una lógica neoliberal: la movilidad como mercancía. El "derecho a viajar" se convierte en una mercancía cuyo uso depende de la solvencia de su portador.

Conclusión: El precio de un sueño mundial

La actualización de la visa de EE.UU., aunque un salto de $185 a $435, no es una mera medida administrativa. Es un cambio de estructura en la posibilidad de movilidad internacional, lo que muestra cómo aparece una nueva desigualdad a través de cifras, mecanismos y tipos de cambio. El golpe se siente económicamente, y también tiene un mensaje social más profundo que no podemos ignorar: no todos los sueños son creados iguales en el mercado mundial.

Para algunos, viajar no tiene límites; para otros, vender los ahorros de toda la vida y pedir prestado a los familiares son los únicos medios para encontrar una entrevista que no promete aprobación. Como Ulrich Beck (2002) ha mostrado en su teoría de la sociedad del riesgo, "la globalización produce nuevas formas de inseguridad que van más allá de las meras físicas e incluso afectan órdenes simbólicos. La incertidumbre de no saber si se tomará, si su esfuerzo resultará haber sido retrospectivamente suficiente o incluso si el dólar -en mi caso esa semana de septiembre y para tantos otros en estos días, el euro- va a subir antes de lo que hace el pago son partes de esa ansiedad global moderna.

Por lo tanto, lejos de ser un mero procedimiento, este aumento es una fuerte pista de las jerarquías existentes: aquellas del dinero, el pasaporte y el origen. Y entre ellas, millones de colombianos que seguirán pagando, quizás con esperanza, el precio de un sueño que desde entonces parecía impedido para ellos."

©2025

Preguntas frecuentes

💰 ¿Cuánto cuesta la visa de Estados Unidos en 2025?
Desde octubre de 2025, el costo oficial de la visa estadounidense sube de 185 a 435 dólares. El incremento está contemplado en la Ley 119-21 y aplica a la mayoría de visas de no inmigrante.


📈 ¿Por qué aumentó el costo de la visa?
El alza responde a la creación de la Visa Integrity Fee, un nuevo cargo de 250 USD destinado a financiar sistemas de control y verificación consular. En la práctica, encarece considerablemente el trámite para miles de solicitantes.


🛂 ¿Qué tipos de visa se ven afectados?
El aumento impacta principalmente a las categorías B1/B2 (turismo y negocios), F y M (estudiantes), J (intercambio) y las visas de trabajo temporal como H, L, O, P, Q y R.
Las visas diplomáticas y de inmigrante no presentan cambios.


🏦 ¿Cómo se puede pagar la visa en Colombia?
Existen tres canales oficiales:

  1. AIS – pago en línea con tarjeta internacional.
  2. PSE – directamente desde una cuenta bancaria colombiana.
  3. Banco GNB Sudameris – pago en efectivo con boleta generada por el sistema.
    ⚠️ Cualquier cobro extra o “gestor” es un posible fraude.

💵 ¿Cuánto equivale el nuevo valor en pesos colombianos?
Con una TRM aproximada de 3.900 COP, el trámite equivale a 1.696.000 pesos, aunque el valor exacto puede variar según el tipo de cambio del día del pago.


🌍 ¿Qué implicaciones sociales tiene este aumento?
El nuevo valor de la visa no solo refleja una decisión económica, sino una frontera social: limita la movilidad internacional de sectores con menos ingresos y profundiza desigualdades. En términos simbólicos, convierte el derecho a migrar en un privilegio.


⚠️ ¿Cómo evitar estafas o gestores falsos?
Tramita únicamente a través del portal oficial de la embajada (AIS).
Los recibos válidos tienen una vigencia de tres días, y ningún canal autorizado cobra tarifas adicionales ni ofrece “citas prioritarias”.